martes, 28 de abril de 2015

Cuando la pasión metalera se conjuga con la buena filosofía

Por March Mazzei - Fotos: Fabián Solari - Un cónclave del heavy metal mostró su producción crítica, que ya tienen un seminario en las aulas de la UBA.

Bajo el pulso acelerado de la música, con remeras negras estampadas que dialogaban entre sí (Hermética, Almafuerte, Motorhead), los cultores del heavy metal se citaron ayer en la Zona Futuro de la Feria para mostrar el costado menos visible de su pasión: la producción intelectual. "El heavy es el hecho maldito del rock burgués, erróneamente ligado a la violencia; pero tiene escritores, pensadores y artistas", sostuvo Sergio Minore, organizador de Cultura Metálica, el evento que también incluyó una muestra de fotos, publicaciones, una performance de dibujo en vivo y música. "Trajimos una versión cápsula de la Feria del Libro Heavy, que arrancó en 2013 y desde entonces crece", detalla Minore, a quien todos llaman Gito. Con las charlas de aquella primera edición armaron Cultura Metálica (editorial Clara Beter), que reúne artículos que analizan, por ejemplo, la poética de Ricardo Iorio desde el estilo gauchesco y proponen una lectura marxista de esta subcultura. Ayer el libro estaba en la mesa de novedades y varios de los autores lo debatieron en este espacio, ideado como un radar de tendencias, estéticas y tecnologías. En la primera biografía de Metallica escrita en Iberoamérica, Matías Recis y Daniel Gaguine pusieron el foco en el contexto geopolítico y en sus videoclips. "Quisimos reflejar las luces y sombras de la banda desprendiéndonos del rol de fans", reconocieron, "con la guía de las lecturas del sociólogo francés Pierre Bourdieu". César Fuentes Rodríguez, histórico personaje de la radio metalera, evocó los pollitos que pisotearon los músicos de Kiss como ejemplo de la diferencia entre mito y realidad. Le siguieron los integrantes del Grupo de Investigación Interdisciplinaria del Heavy Metal Argentino (GIIHMA), que relataron su desembarco en la universidad. Porque en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA se llenó un seminario con todos estos temas y una bibliografía completa de filósofos como Michel Foucault y Giorgio Agamben. A través de los años, cuentan, en los pasillos de la facultad comenzaron a reconocerse por las remeras. "Venimos de Letras, de Sociología, de Filosofía, y nos dimos cuenta de que detrás del heavy metal funcionaba una biblioteca enorme", amplía Emiliano Scaricaciottoli. "Pero instalarlo en la academia fue un desafío importante –reconoce–. "Aunque se lo mete por la ventana cuando se habla de rock, creemos que hay algo distintivo en el heavy metal nacional: si no, ¿por qué el dirigente asesinado Darío Santillán tenía la remera de Hermética?" Como número final, se sumó Gustavo Zavala, bajista de la banda Tren Loco. "En cualquier casa de un chico de clase trabajadora no se abre ninguna puerta, hay que voltear paredes", dijo a modo de mensaje. "El heavy metal te enseña a no rendirte, sólo hace falta tener pasión".

Fuente: Revista Ñ




Gito Minore, el organizador
Pampa Allen, gaitero de Tridana
Isidoro Reta, ilustrador
Gustavo Zabala, bajista de Tren Loco
 

César Fuentes Rodríguez, periodista de Rock & Pop
Matías Recis y Daniel Gaguine, autores del libro
Metallica. Furia, sonido y velocidad

Raza Trunka

Raza Trunka
Raza Trunka
Con el enorme Roberto Cosseddu, bajista de Kamikaze